¿Qué es la rehabilitación?
La rehabilitación es el cuidado, recuperación y readaptación de un animal salvaje que presenta algún problema que le impide sobrevivir por sí mismo en libertad (orfandad, daños físicos, problema comportamental), con el fin último de poder reintroducirlo en la naturaleza.
En la rehabilitación podemos hablar de varios conceptos clave:
Intervención. Actuación ante la presencia de un animal con problemas que no puede desarrollarse correctamente y por sí mismo en el medio. Según el estado del animal, se evalúa el grado de intervención, siendo el más alto aquel en el que el animal es capturado y trasladado a una clínica veterinaria o centro de rehabilitación.
Rehabilitación. Recuperación y readaptación de animales silvestres que han sufrido lesiones físicas o comportamentales a causa de la intervención directa o indirecta del ser humano, como son los animales heridos por armas de fuego, atropellados, intoxicados por contaminantes o refugiados en viviendas, entre otros, o de animales accidentados por causas fortuitas, por ejemplo, crías huérfanas. Es el proceso que se realiza para garantizar que un animal se encuentre preparado para enfrentar su regreso al medio natural, luego de haber permanecido aislado de éste por la captura y el cautiverio.
En la rehabilitación es necesario ofrecer un área con condiciones medioambientales semejantes al hábitat natural para que los animales se desarrollen y puedan volver a su medio con posibilidades de subsistencia, pero que al mismo tiempo permita al personal de manejo intervenir cuando se hace necesario.
Dentro del proceso de rehabilitación hay que distinguir entre:
Rehabilitación física. Busca garantizar la buena salud y la recuperación de las capacidades físicas del animal para facilitar así su buen desempeño en el medio.
Rehabilitación biológica o comportamental. Esta es más compleja y crítica, pues involucra aspectos psicológicos poco conocidos en la actualidad, y pretende asegurar que el individuo aprenda a desempeñarse exitosamente en el hábitat natural.
Instalaciones de manejo. Área en la que se efectúa la rehabilitación. En ella debe primar la adecuación ambiental de los encierros, de acuerdo a la especie alojada, buscando suplir las necesidades biológicas básicas del animal. Es importante ubicar barreras visuales entre los animales y el personal, y limitar el manejo al estrictamente necesario por cuestiones de sanidad y de monitoreo comportamental.
Es clave el uso de todos los métodos de enriquecimiento ambiental dentro del cercado, en el manejo diario y en la presentación de las dietas, los cuales pueden ir desde la adecuación del entorno con material vivo como plantas o árboles, el uso de materiales artificiales para simular vegetación, el empleo de disfraces y camuflaje para el aseo y suministro de alimento, y la presentación de las dietas de la manera más similar posible a lo que los animales encontrarán en el medio natural, o de manera artificial, buscando incentivar la búsqueda y el trabajo para la obtención de comida.
En las instalaciones deben seguirse rigurosamente una serie de normas:
- No hablar ni interactuar con los animales. Permanecer lo más indiferente posible ante el contacto con los ejemplares.
- No usar objetos que emitan sonidos artificiales o “humanos”.
- Las zonas de rehabilitación deben frecuentarse en la menor medida, evitando en lo posible el ingreso a estas zonas de personal ajeno al centro.
- Usar ropa oscura o que se camufle bien con el medio.
- Implementar y utilizar técnicas de suministro de alimento que simulen el medio natural y suministrar el alimento lo más natural posible.
Enriquecimiento ambiental. Proceso por el que se procura incrementar la complejidad del ambiente en el que vive un animal, con el objetivo de estimularlo para que desarrolle conductas más complejas y diversas. Este proceso se realiza através de cambios en el lugar mediante la presentación de diferentes olores, estructuras nuevas, objetos novedosos, interacción con otros individuos de la misma o diferente especie, etc.
Estos cambios pretenden incrementar el bienestar del animal, ya que permite a los animales satisfacer necesidades físicas y psicológicas.
Reintroducción o liberación. La liberación es la culminación del proceso de rehabilitación. Sólo deben ser liberados los animales que físicamente y comportamentalmente sean considerados aptos para ello tras un proceso de evaluación.
La liberación puede ejecutarse de dos maneras:
- Liberación dura (hard release): la captura, el transporte y la liberación del animal se hacen sin ningún tipo de aclimatación previa a la zona en donde se suelta.
- Liberación blanda (soft release): la liberación del animal va acompañada de un período de aclimatación previo en la zona en la que se va a soltar.
Para que un animal pueda ser liberado de manera segura en una zona específica es necesario realizar diversas acciones previas:
- Determinar la ubicación geográfica con probable presencia de la especie.
- Según la ubicación geográfica de la especie o subespecie, determinar un lugar que sea lo más seguro posible para el animal (control de cacería, talas, quemas; nula o escasa presencia de asentamientos humanos), y que cuente con amplias zonas de vegetación primaria o secundaria, apropiada para la supervivencia de la especie; en este punto debe considerarse el rango de acción o “home range” de la especie.
Seguimiento. El seguimiento post-liberación es clave en los procesos de rehabilitación y reintroducción. El seguimiento indicaría si los animales son capaces de subsistir por sí mismos exitosamente, y si son viables como componentes biológicos de un ecosistema. Para efectuar el seguimiento de manera científica, deben establecerse criterios claros de evaluación, antes y después de la liberación, para compararlos en las dos circunstancias, y poder aplicar así un modelo estadístico que sirva para analizar los resultados obtenidos. En el caso de animales solitarios, la telemetría puede ser un buen método de seguimiento, pues la observación visual de un solo individuo es más complicada.
Oso con problemas. Ejemplar que no puede sobrevivir por sí solo en la naturaleza; por ejemplo: osezno huérfano, oso herido o enfermo, etc. Es un oso que se encuentra en una situación que requeriría la intervención humana para ser resuelta. Se incluyen en esta categoría los casos de crías abandonadas o separadas de su grupo familiar, ejemplares heridos, enfermos, con síntomas evidentes de envenenamiento, atrapados en un lazo u otro dispositivo, acosados por la presencia humana o circunstancias similares.
Protocolos. Documentos que establecen pautas y procedimientos recomendados para la rehabilitación en cualquiera de sus fases.
Para la obtención y desarrollo de estas definiciones se han consultado las siguientes fuentes:
Brieva, C., Sanchez, A., Moreno, W., & Varela, N. (2000). Fundamentos sobre rehabilitación en fauna silvestre. In Memorias Curso Practico, Primer Congreso Colombiano de Zoología ICN. Instituto de Ciencias Naturales, Universidad Nacional de Colombia.
Blanco, JC, Ballesteros, F., Palomero, G. (2016). Rehabilitación de osos huérfanos, heridos y abandonados. Fundación Oso Pardo; documentos técnicos.
Tuñon, J; E. Díaz y J. Naves. 2018 Proyecto “Trabajando el bienestar de osos pardos cantábricos cautivos 2017” Fundación Oso de Asturias – Fundación Biodiversidad
Algunos casos de manejo de osos en procesos de rehabilitación
Península Ibérica
Villarina
Junio 2008 – Parque natural de Somiedo (Asturias). Villarina nació en enero de 2008 en el Parque Natural de Somiedo. En junio unos turistas la encontraron vagando desorientada por la cuneta de una carretera. La osa estaba muy desnutrida, con problemas de locomoción y pérdida de equilibrio, problemas de visión y otros síntomas neurológicos provocados por un traumatismo craneoencefálico grave. El 11 de noviembre, con unos 10 meses de edad, Villarina fue liberada en el Parque Natural de Somiedo. Pesaba 28 kilos, más que la media de los cachorros silvestres de su edad. Fue equipada con un radioemisor GPS y otro VHF pegados al pelo de la espalda que permitieron seguirla hasta el siguiente verano, cuando se desprendieron con la muda. Los datos proporcionados por los radioemisores y las observaciones a distancia confirmaron la adaptación de Villarina a la libertad.
Lara
Abril 2011 – Parque Natural de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias (Asturias). La osa Lara fue localizada malherida por un vigilante de la Fundación Oso Pardo cuando tenía unos 16 meses. Se encontraba muy debilitada y con heridas penetrantes en la región inguinal, lumbar y grupal, con desgarros musculares severos y posible fractura a nivel de la cadera izquierda. Presentaba estado de shock cardiovascular y orgánico severo, con grave deshidratación. Tras un proceso de cuidados veterinarios, en agosto de 2011 fue liberada cerca de donde fue encontrada, equipada con un crotal, un radioemisor adherido al pelo y un collar GPS.
Jimena
Abril 2012 – Palacios del Sil (León). Jimena tenía 3 meses y pesaba 5 kilos cuando fue encontrada por un conductor en una carretera del noroeste de León. El 26 de octubre de 2012, cuando la osa tenía unos 9 meses y pesaba 36 kilos, fue trasladada para su liberación. La osa murió en el trayecto. La necropsia realizada concluyó que la muerte se produjo por una miopatía degenerativa grave y difusa, además de alteraciones compatibles con shock. La «miopatía de captura» está asociada en animales salvajes a estrés, transporte y miedo intenso.
Molina
Septiembre 2013 – Parque Natural de las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias (Asturias). Molina, con solo 6 kilos (un tercio del peso normal de los oseznos de su edad), se encontraba en un estado físico deplorable presentando deshidratación, caquexia, anemia, insuficiencia renal, traumatismo cráneo-encefálico y luxación de cadera cuando fue localizada. Una vez recuperada, fue liberada el 29 de noviembre de 2013 en la Reserva Natural Integral de Muniellos y equipada con dos radioemisores que permitieron seguirla durante los siguientes meses. Al principio Molina mostró un comportamiento normal, pero unos días después comenzó a acercarse a la localidad de Degaña sin miedo aparente a las personas y los vehículos y encamándose cada día en las afueras del pueblo. Se intentó espantar a la osa en varias ocasiones y frenar el proceso de habituación, pero terminó por no huir. Ante esta situación, el gobierno asturiano decidió capturar a Molina y trasladarla al recinto osero de la Fundación Oso de Asturias. El intenso e inevitable contacto con los veterinarios que curaron sus graves heridas es quizás la causa de esta habituación a las personas.
Auberta
Abril 2014 – Valle de Arán Pirineos (Lleida). Auberta se encontró con 3 meses y medio y en una buena condición física, aunque sin su madre. Durante nueve días se realizaron varios intentos de liberarla con la esperanza de que se reuniera con su madre, sin éxito. Finalmente fue trasladada a un cercado construido en un bosque maduro de hayedo-abetal alejado de la actividad humana. Ante el correcto comportamiento de la osezna, se decidió preparar su liberación en el entorno del cercado y equiparla con un emisor GPS pegado al pelo, marcas en las orejas y un emisor VHF intraperitoneal. Tras varios días se encontró muerta. La necropsia realizada determinó que la muerte se produjo por salida del intestino por la dehiscencia de la incisión ventral de la operación en la que se le colocó el transmisor intraperitoneal.
Yernes
Abril 2021 – Yernes y Tameza (Asturias). Un grupo de senderistas observa a un osezno solo en una carretera. Era un macho de unos 3 meses y 2,8 kg de peso. Se deja durante el día en un trasportín observando si aparecía la madre, sin embargo, al llegar la noche y por el riesgo que suponían las frías temperaturas, se decide intervenir y recogerlo. El osezno evolucionó favorablemente y el 22 de julio el servicio de Medio Ambiente del Principado de Asturias decide su liberación en una zona cercana a donde se encontró, con un peso de 21 kg. Antes de la suelta, Yernes se equipó con un GPS de pelo y un crotal. El radioseguimiento posterior muestra un comportamiento normal del osezno y su adaptación exitosa al medio natural.
Resto de Europa
Mellous
Julio 2018. Un osezno de unos seis meses y en aparente buena condición física es encontrado sin su madre. Se realiza un muestreo genético, instalación del transmisor VHF, rehidratación alimenticia, y observación del comportamiento. Por la noche se libera. A los dos días el oso es recapturado porque tiene un comportamiento estereotipado, aunque al recuperar un comportamiento normal, se decide volver a liberar. A las dos semanas aparece muerto. La autopsia muestra caquexia (debilitamiento severo del cuerpo) e hipertension craneal como causas de la muerte.
Douilluous
Junio 2019 – Ariége (Pirineos franceses). En junio se captura un osezno para su rehabilitación y suelta en Ariège (Francia). El proceso de rehabilitación se lleva a cabo en un cercado de 200 m2, una superficie que no se considera adecuada por lo que se propone liberar el osezno lo antes posible para evitar la habituación a las personas. Previo a la suelta se hace un test de comportamiento para comprobar la reacción ante la presencia humana; el test es favorable (no familiaridad frente a los humanos) por lo que se libera en septiembre habiéndolo equipado con un collar GPS y emisor VHF. Los resultados de su seguimiento confirman una adaptación favorable al medio.
Rumanía
Rumanía es el país europeo en el que más casos de intervenciones de producen, resultado de la alta población osera que habita en el territorio. En el caso de la experiencia de Bear Again, se han rehabilitado con éxito y devuelto a la naturaleza aproximadamente 200 osos que, de otro modo, habrían terminado en zoológicos o santuarios, cautivos toda su vida.
Aquí no podemos hablar de casos concretos, ya que con todos los oseznos intervenidos (pudiendo llegar a haber 35/40 oseznos simultáneamente) se sigue un protocolo similar y generalmente simultaneo para todos los individuos. En una primera fase (durante su primer año de vida), y en el caso de que no tengan necesidades específicas veterinarias, los oseznos huérfanos se ubican en un recinto naturalizado (cuatro recintos comunicados entre sí) y que permite el desarrollo de sus instintos natos. Posteriormente y en una segunda fase (durante el segundo año) pasan a un estado de semilibertad o fase de exploración, en la cual el recinto principal se abre y los oseznos comienzan a explorar cada vez más, alejándose gradualmente del núcleo del centro de rehabilitación y comenzando su dispersión. Durante esta fase, el alimento que se les va aportando a los oseznos en el recinto, va disminuyendo, siendo cero al final, fomentando los movimientos de dispersión. En este momento, los osos que van a ser reintroducidos en sus zonas de origen son capturados y transportados a su lugar de liberación final, momento en el que se les colocan collares GPS para su posterior seguimiento.
Durante todo el proceso de rehabilitación la aportación de alimento se realiza evitando totalmente la asociación de los alimentos con los humanos, para lo que se utiliza un dron y, próximamente un sistema por cable, permitiendo que nadie se tenga que acercar a alimentar a los oseznos. Además, la zona onde se realiza la rehabilitación, es de acceso restringido, reduciendo al máximo el contacto humano con los cachorros.
La tasa de supervivencia después de la liberación es de alrededor del 60%. Se considera que el éxito del proceso de rehabilitación no se mide por la tasa de supervivencia de los cachorros después de la liberación, sino por el grado de adaptabilidad a la vida en la naturaleza sin que resulte en osos habituados con comportamientos desviados. o comportamiento problemático.
Grecia
Arcturos ya cuenta con 12 reintroducciones exitosas de oseznos en la naturaleza y 5 de corzos mientras que, por primera vez en 2022, se intentarán las primeras reintroducciones de un lobo huérfano y un chacal.
Instalaciones de rehabilitación
Cercados Oseros de Santo Adriano – Asturias (Fundación Oso de Asturias)
La FOA cuenta con dos cercados para albergar osos en cautividad.
Cercado 1. Recinto con una superficie de monte de casi 40.000 m2 localizado en una ladera caliza con abundante vegetación, principalmente encinas y avellanos. En su interior se ubica un cercado de uso y manejo de aproximadamente 800 m2 donde se encuentra el punto de abastecimiento de agua, jaulas – comedero y dos oseras artificiales.
Cercado 2. Estas instalaciones están divididas en tres zonas con una superficie total de aproximadamente 7.000 m2. Están diseñadas para poder manejar a los animales dependiendo de las diferentes circunstancias que se puedan dar.
El primero de los dos cercados se inauguró en 1996 ante la necesidad de buscar un lugar para albergar a Paca y a Tola (dos hembras de Oso Pardo Cantábrico, rescatadas de furtivos y de imposible reintroducción en el medio natural por estar habituados a la presencia humana), y se construyó un cercado que rodea una superficie de monte de más de cuatro hectáreas, siendo un extraordinario encinar de carrascas (Quercus rotundifolia). El sustrato rocoso de caliza de montaña ofrece a este tipo de encinas el ambiente seco que les permite desarrollarse en un clima tan húmedo como el de Asturias. Situado enfrente del primero, se construyeron otras instalaciones en el 2008.
Estas instalaciones permiten un fácil manejo de los animales sin tener que recurrir a métodos químicos de inmovilización (anestesia) y al mismo tiempo evitar cualquier contratiempo desde el punto de vista de seguridad. Este cercado se subdivide en tres áreas conectadas entre sí. En su diseño no presenta esquinas con el fin de evitar que un animal pueda acorralar a otro. Es en este segundo cercado donde se están desarrollando las instalaciones para la rehabilitación de osos con problemas. Actualmente se cuenta con un espacio interior de 20m2, dotado de luz ultravioleta para evitar el frío, enriquecimiento ambiental, báscula y cámara de vigilancia en tiempo real y de un espacio externo de unos 120 m2 dotado de enriquecimiento ambiental, cercado por valla electrificada y un panel de madera que evita tanto la visión como el sonido externos y una cámara de video vigilancia en tiempo real. Se tiene previsto ampliar el espacio exterior comunicando el actual con el resto del cercado ya existente.
Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Cantabria, en Villaescusa (Gobierno de Cantabria)
Unidad para la recuperación de osos pardo en el CRFS de Villaescusa, Cantabria
El Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Cantabria cuenta con una instalación específica para la hospitalización y recuperación de osos pardos.
Esta instalación, de unos 150 metros cuadrados, está dotada de un recinto exterior y dos interiores.
Las instalaciones están video-vigiladas y se manejan desde el exterior, lo que permite trabajar en ellas (naturalizarlas, realizar la limpieza y el manejo de los ejemplares) evitando el contacto con ellos.
El Centro de Recuperación cuenta además con instalaciones propias de un hospital veterinario: sala de rayos X, quirófano con gases anestésicos y un laboratorio completamente equipado para realizar controles analíticos de los osos.
Desde el 2016, año de construcción de la unidad para osos pardos, este centro ha albergado a tres crías de oso pardo y un ejemplar adulto.
Monte dehesa de Valsemana – León (Junta de Castilla y León)
Ocupa un área de 1000 hectáreas y consta de dos cercados de 0,60 y 0,92 hectáreas respectivamente. Estos cercados se construyeron en la década de los 80 para la recuperación y/o aclimatación de osos pardos cantábricos.
Se trata de dos cercados independientes, comunicados entre sí, de 0,92 ha (Osera 1) y de 0,67 ha (Osera 2).
Están rodeados de un muro construido de bloques de hormigón con una altura de entre los 2,5 y los 4 metros.
- Cuenta con instalación para la colocación de pastor eléctrico en la parte alta del muro de hormigón.
- Un cercado eléctrico a media altura del muro.
- Un cercado eléctrico en la parte alta del muro.
Están totalmente revegetados, con árboles de diferentes tamaños.
Ambos cercados son atravesados por el arroyo Valsemana.
Por el lateral norte de los cercados discurre un camino en dirección noroeste-sureste.
Cuentan con una manga de manejo, con una caseta de vigilancia en zona lateral, con corriente eléctrica de baja tensión y con un punto de vigilancia, que separa los dos cercados.
Cuenta con una zona central de rocas a modo de osera. Acondicionamiento interior y exterior de la cueva artificial que garantice el aislamiento térmico y de la lluvia; y que asemeje la entrada de una cueva natural (Se introduce madera, hierba, troncos).
Es accesible con vehículo y trampa culvert. Y para camión pluma por si fuera necesaria la introducción de elementos de enriquecimiento ambiental de gran tamaño.
Es una zona aislada de núcleos de población. Todo su perímetro es accesible por si fuera necesario variar los puntos de aporte de alimento.
Enriquecimiento ambiental del recinto (rocas, troncos, ramas, arbustos, juguetes,…).
Sistema de videovigilancia: 8 cámaras con grabación continua que garantizan la visibilidad en directo de prácticamente todo el recinto y de los testigos de corriente, con repetidores wifi, visualización desde edificio administrativo de la finca.
Cámara de fototrampeo en interior de cueva artificial.
Val d’Arán (Generalitat de Catalunya)
El recinto consta de un área de 1 hectárea, dentro de la cual hay un recinto de aclimatación (con rejas también por arriba) de unos 100m2. Y este último conectado con el box de manipulación (contenedor metálico adaptado).
La separación entre los postes es de unos cinco metros, en función de la orografía del terreno, anclados en el suelo una profundidad mínima de 80 cm, con hormigón. La malla que cierra los cercados es malla tipo ciclón reforzada en el perímetro general y con una altura de 3 metros. A lo largo de la valla van 5 líneas de hilo eléctrico de protección.
Bear Again (Rumanía)
Las instalaciones de Bear Again cuenta con un sistema de cercados distribuidos en una superficie de 22 hectáreas.
El recinto de “acomodación” (el primero en el que se alojan los oseznos recién llegados) es el primero y el más pequeño, con forma redonda y unos 40 metros de diámetro. Como todos los cercados del centro, está hecho con postes de madera maciza (roble y acacia) que tienen aproximadamente entre 1,5 y 2 metros de altura y entre 7 y 15 centímetros de ancho, separados entre sí unos 2 metros. El vallado consiste en una malla metálica que se fija a los postes y está enterrada en el suelo a una profundidad de 30-40 centímetros. Lo que caracteriza a este recinto es que los cables eléctricos en el interior del mismo están colocados más cerca unos de otros, ya que aquí los cachorros aún son pequeños (2-5 meses de edad). El primer cable se coloca a unos 5 cm del suelo y los otros 6 cables se colocan a 10 cm de distancia unos de otros. Partiendo aproximadamente de la mitad de la altura de los postes de madera, se han añadido placas metálicas curvadas hacia el interior del recinto para así evitar que los oseznos salgan del recinto hasta que aprendan a evitar las vallas. En el exterior del recinto hay 4 cables eléctricos colocados a unos 40 cm uno del otro para evitar que entren osos salvajes y otros depredadores.
Los siguientes 3 recintos están hechos de manera similar con los mismos tipos de materiales, pero hay 5 cables eléctricos en el interior a unos 25 cm uno del otro y 3 cables eléctricos en el exterior colocados a unos 40 cm uno del otro.
El último recinto tiene aproximadamente 2 hectáreas y consta de dos líneas de cercas colocadas a aproximadamente 1,5 metros entre sí, que tienen entre 7 y 10 cables eléctricos solo en el interior.